Compromiso





Una vez que tenemos claro el motivo por el cual estamos dispuesto a andar por el infierno, es hora de ponernos en marcha.

El compromiso está en función de los valores, de la dirección que el cliente ha decidido seguir. Es posible que estemos en una fase en que el cliente no tenga claro qué quiere en la vida, por lo que puede comprometerse con experimentar para elegir dicho camino. O es posible que se tenga bien claro hacia donde dirigirnos.

Los valores pueden desglosarse en metas, y estas metas se describen en acciones que una persona puede llevar a cabo en su día a día, de la manera más concreta posible.

El compromiso es con la dirección valorada, y no con el éxito. No se intenta que el cliente se comprometa a cumplir sus acciones y sus metas. No se intenta algo, de hecho: se muestra en consulta que el compromiso es algo que ocurre en el momento en que ocurre, y para ello tenemos los siguientes ejercicios.



INTERVENCIÓN EN CONSULTA


Comprometerse a saltar

Se hace ver al cliente que el compromiso es con el salto, no con el resultado del salto. Para ello, se puede usar cualquier elemento en consulta del cual se pueda dar un salto leve: un escalón, una silla, incluso se puede usar cualquier manual que el terapeuta aborrezca (cualquier clasificación de síntomas podría valer bien). 

T: bien Antonio, ¿te comprometes a saltar desde aquí?
C: sí, es fácil
T: ¿y si no lo fuera?
C: podría salir mal, y entonces no lo haría
T: claro, entiendo que podría salir mal, ¿pero sabes qué?, yo realmente no te he preguntado si te comprometes a saltar "bien" desde aquí, ¿verdad?
C: bueno, no me has dicho eso, es cierto
T: entonces, ¿te comprometes a dar un salto desde aquí?
C: ¿qué pasa si sale mal?, quiero decir, entiendo que en la vida hay que dar saltos, ¿no?, imagino que ahí es adonde quieres llegar...
T: bueno, no estoy hablando de vida ahora mismo; agradezco tu comparación, pero realmente me refiero a algo muy concreto ahora mismo: saltar desde aquí. ¿Te comprometes?
C: bueno vale, sí
(el cliente se sube al lugar y se prepara para saltar)
T: ¡espera espera!, antes de saltar, quiero que me digas si podrías comprometerte con dar un buen salto, quiero decir, demuéstrame que el salto que vas a dar va a tener un buen resultado.
C: bueno, es lógico, no me voy a matar desde aquí, incluso tendría que ser muy torpe para hacerme una lesión, así que va a tener seguro un buen resultado, sí, y lo voy a hacer.
T: no te creo, lo siento
C: ¿qué?
T: que no me vale, que todo eso es palabrería, literalmente, no me has convencido en absoluto; puedes perder el equilibrio en el último momento.
C: bueno, sí, a ver, siempre puede pasar algo horrible, ¿es ahí donde quieres ir a parar?
T: no, quiero que me demuestres que el salto que vas a dar va a ser bueno
C: está bien; no puedo
T: entonces, ¿qué puedes?
C: ¿cómo que qué puedo?
T: sí; me dices que no puedes demostrarme ni asegurarme que vas a dar un buen salto, y en eso estamos de acuerdo; ahora, desde ahí, independientemente de lo que puedas demostrar o no, ¿qué puedes hacer?
C: puedo...bueno, puedo saltar
T: ¿bien o mal?
C: no lo sé, definitivamente parece que no voy a saberlo
T: vale, ¿y qué vas a hacer?
C: saltar
(salta)
T: ¿qué tal?
C: bueno, bien
T: ¿qué habría pasado si hubieras intentado demostrarme...si hubiera intentado demostrarte...el resultado del salto antes de saltar?, ¿habrías tenido alguna certeza más allá de que vas a dar un salto, con todas sus consecuencias, buenas o malas?
C: no realmente...imagino que podría haberme quedado ahí un buen rato, sin saltar, haciendo cualquier cosa, pero definitivamente no saltando
T: eso se parece a algo, ¿no?
C: ¿el qué?
T: quedarse un buen rato...haciendo cualquier cosa...pero no aquello con lo que te habías comprometido
C: bueno...supongo que es parecido a lo que he hecho este tiempo...asegurarme, tener control...
T: eso es lo que hiciste, vale; ¿qué quieres hacer ahora: asegurarte o saltar?
C: saltar
T: vamos a ello


Otro ejercicio igualmente útil es el de mirarse a los ojos, también orientado a trabajar aceptación de sensaciones, y que se puede encontrar en el apartado de aceptación.

Barreras

Cuando el cliente se compromete, es buena idea tratar de conocer aquellos "pasajeros incómodos" que se va a encontrar en el camino con el que se ha comprometido.

Esto puede hacerse marcando ciertas acciones que tengan que ver con el día a día, y evocando todo aquello que se interpondrá en su camino: pensamientos, sensaciones, situaciones externas que no dependan del cliente, cualquier cosa que podrá encontrar en su "salto".

Una vez se tengan identificadas, se pueden enumerar, de la siguiente manera:

"- En mi compromiso con la profesionalidad, me encontraré a menudo con ___________"

El compromiso no es con caminar sin barreras, el compromiso es con caminar. Las barreras van a estar, y se trabajarán con los demás elementos de ACT.

Se orienta a que el cliente "compre" las barreras de su compromiso, y así aumente su disposición a ello.


Comprometerse a fallar

El compromiso implica fallos. Implica abandono. Implica fracaso. Es buena idea poner encima de la mesa justo esto: si en el compromiso fallamos, fallemos de manera comprometida.

Si el compromiso genera rigidez estamos yendo en una dirección vieja, poco útil: posiblemente volvamos a la evitación de la experiencia en la cual el cliente se hallaba inmerso.

Es útil, por tanto, pedirle al cliente que falle a propósito algo que se había propuesto. Esto, además, genera que en esos momentos el cliente valore cada vez como una acción apetitiva el hecho de mostrarse dispuesto a seguir con su compromiso. De esta manera tiene experiencia con el fallo, lo hace una posibilidad de elección y que en gran medida depende de él mismo.



EJERCICIO


Se pide al lector que valore si las siguientes intervenciones por parte del terapeuta son adecuadas teniendo en cuenta lo anterior:

1. "Claro, tienes que estar preparado para todo, así, en tu compromiso, si caes, podrás levantarte cuanto antes para seguir avanzando".
2. "Tenemos que anticiparnos a las barreras para que te afecten lo menos posible"






4 comentarios:

  1. Se pide al lector que valore si las siguientes intervenciones por parte del terapeuta son adecuadas teniendo en cuenta lo anterior:
    1. "Claro, tienes que estar preparado para todo, así, en tu compromiso, si caes, podrás levantarte cuanto antes para seguir avanzando".
    Cuando trabajamos en el compromiso, no fomentamos que el cliente esté preparado para todo: lo que buscamos es que tenga claros sus valores, qué metas le acercan a ellos y que acciones puede hacer día a día para alcanzar dichas metas. Una vez hecho esto, lo que se busca es que el cliente se comprometa con dichas metas mediante la realización de las acciones que se haya propuesto. No buscamos preparación ante todo, sino que el cliente esté dispuesto a realizar estas acciones independientemente de sus eventos internos y que contemple el fracaso como una posibilidad más.
    2. "Tenemos que anticiparnos a las barreras para que te afecten lo menos posible"
    Sí es cierto que anticipar las posibles barreras facilita que podamos gestionarlas más eficazmente cuando nos encontremos con ellas; no obstante, no buscamos que no nos afecten (ya que nos van a afectar hagamos lo que hagamos), sino que no nos impidan continuar haciendo aquellas cosas que, por el valor que tienen para nosotros, queremos y nos hemos comprometido a hacer.

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  2. a) "Claro, tienes que estar preparado para todo, así, en tu compromiso, si caes, podrás levantarte cuanto antes para seguir avanzando".
    - Creo que esta intervención no sería del todo adecuada, ya que, en vez de animar al cliente a que esté preparado para todo, habría que animarlo a comprometerse a seguir trabajando en la dirección que se ha marcado, trabajando hacia sus valores, sabiendo que en este camino pueden aparecer caídas, pero no por ello dejar de lado las acciones que le llevan a esos valores. La decisión de que desee levantarse o no tras esas caídas sería cosa del cliente.



    b) "Tenemos que anticiparnos a las barreras para que te afecten lo menos posible"
    - De nuevo sería inadecuado esta forma de proceder, ya que, aunque el cliente ha de ser consciente de sus barreras, no tiene por qué anticiparse a ellas ni pretender que no le afecten, sino que debe aprender a seguir actuando en dirección a sus valores, las metas que lo llevan hacia estos, a pesar de sus eventos internos o las barreras que puedan surgir.

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  4. 1. "Claro, tienes que estar preparado para todo, así, en tu compromiso, si caes, podrás levantarte cuanto antes para seguir avanzando".

    En este primer caso, considero que sí es más o menos adecuada la intervención del terapeuta, pero creo que sobraría eso de “... tienes que estar preparado para todo... levantarte cuanto antes”. Tal como lo veo, creo que en una intervención de este tipo no se trata de que el cliente “sienta una sensación (falsa además) de control sobre todo”, lo cual puede fomentarse con frases de ese tipo y
    al decir, “levantarte cuanto antes”, puede generar cierta ”huida rápida” ante el hecho de verse en una situación en la que haya fallado o durante el “salto” haya sufrido algún inconveniente... es decir, es como decirle sí puedes errar pero sí eso pasa sal de ahí cuanto antes para seguir progresando. En parte, esto es lo que se pretende, pero sin evitar las caídas o saliendo de ellas rápidamente, al contrario el hecho de comprometerse también implica caer e incluso el terapeuta debe generar situaciones en las que el cliente “falle”, creo que se debe enfocar más hacia que el cliente contemple “el fracaso” como una posibilidad más y no huya de él sí estense da.

    2. "Tenemos que anticiparnos a las barreras para que te afecten lo menos posible"

    En este segundo caso opino que el terapeuta no es acertado en absoluto. No se trata de que el cliente, en su compromiso se anticipe y no se vea afectado por los baches que sufra en el camino. Al contrario ACT promueve no anticiparse (rumiar, enredarse, divagar... ) sino que actuemos y no nos quedemos paralizados. Sí acaso, podríamos pensar en aquellas posibles barreras pero haciendo énfasis en ellas como un reto, y para que estas no nos impidan hacer aquellas cosas que son importante para nosotros, aquello con lo que nos hemos comprometido...Por otro lado, se trata de aceptar todo aquello que nos afecte y haga sentir malestar y dolor, que lo observemos y sintamos tal y como es, cuanto sea sea necesario y andemos con ello...por lo tanto “que las barreras te afecten lo menos posible”, creo que no transmite en absoluto la esencia de este tipo de terapia.

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